CÓMO GESTIONAR LA VUELTA DE LAS VACACIONES

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Tabla de contenidos

O lo que conocemos por: depresión postvacacional.

Cómo gestionar la vuelta de las vacaciones.

Después de un período de vacaciones más o menos largo, en el que te has permitido desconectar, fluir, estar con tus seres queridos y te has olvidado de las obligaciones o deberes, es normal, que a la vuelta de las vacaciones puedas sentirte algo confusos, tristes o nostálgicos, ya que la vuelta al trabajo implica volver a conectar con la rutina  y los quehaceres del día a día. 

Disfrutar del trabajo, de lo que haces y estar a gusto en tu empresa, puede a ayudarte a volver con más ganas y adaptarte más rápidamente a la situación, pero aún así es común experimentar una dificultad de adaptación llamada: depresión postvacacional.

¿EN QUÉ CONSISTE LA DEPRESIÓN POSTVACACIONAL?

La depresión postvacacional es un trastorno adaptativo, es decir, una dificultad para adaptarte a una situación, en este caso a la vuelta al trabajo. Este puede durar entre 2 y 21 días y sus síntomas acostumbran a ser: apatía, cansancio, decaimiento, falta de motivación, irritabilidad, negatividad, disminución de productividad y rendimiento, etc…

Artículo recomendado: ¿Qué es y cómo gestionar el estrés?

10 CONSEJOS PARA GESTIONAR MEJOR LA VUELTA DE LAS VACACIONES:

Para poder combatir este trastorno adaptativo, encontrarás a continuación 10 tips que te ayudarán a vivir la vuelta al trabajo de una forma más saludable:

  1. Céntrate en el día a día:

Volver al trabajo no tiene porque ser una tremenda catástrofe. Disfrutar del día a día y las pequeñas cosas puede ser esa vitamina que necesitas para ajustarte a la rutina de una forma adecuada. No te apresures, no te estreses, no te adelantes. Centrate en que tienes que hacer día a día.

Dedica diariamente tiempo no sólo a la productividad y aquello que debes hacer, sino también a la diversión y al relax, de esta forma vivirás más el presente y disfrutarás más tus días. 

  1. Vuelve con calma:

No tienes porque solventarlo todo el primer día que vuelvas, tampoco la primera semana. Date un tiempo para ubicarte y ve haciendo poco a poco, a tu ritmo. 

  1. Intenta no empezar un lunes:

Si empiezas a mitad de semana o finales,  podrás empezar de una forma más paulatina, teniendo más cerca el fin de semana. Esto te ayudará a reincorporarte poco a poco e ir mentalizándote. 

  1. Reintroduce hábitos poco a poco:

Muchas veces al volver, se quieren reincoporar todos los hábitos rápidamente, pero, muchas veces más no es mejor y hacerlo puede suponer una carga de estrés añadida. Empieza poco a poco a volver a incluir en tu día a día el deporte, la alimentación, la lectura, etc.

  1. Regresa unos días antes a casa:

Regresar unos días antes te permitirá poder mentalizarte, adaptarte y planificar tu regreso al trabajo, de esta forma no será tan repentina y chocante.

  1. Nuevas metas y objetivos:

Como un pequeño año nuevo, septiembre puede ser un buen momento para volver con ganas y replantearse con lo que queda de año, qué metas y objetivos quieres llevar a cabo. 

  1. Haz cosas de las que disfrutes:

Vale, vuelves al trabajo, pero no significa que no puedas seguir haciendo cosas de las que disfrutas, que te recuerden a esos momentos de desconexión que has experimentado en verano. Para ello, sigue invirtiendo tiempo en aquello que disfrutas, ya sea pintar, hacer deporte, pasear por la playa, descubrir nuevos lugares, etc. 

  1. Planea próximo viaje o escapada:

Sobre todo para los más viajeros, que acabe un viaje, es motivo suficiente para planificar otro. Han acabado tus vacaciones, pero puedes seguir organizando escapadas a lugares que quieras visitar y con ello coger la rutina con más ganas. 

  1. Sigue dedicando tiempo a tu entorno:

Has vuelto de las vacaciones, pero invertir tiempo en tus seres queridos sigue siendo algo que puedes seguir haciendo y que seguro que te hace sentir genial. No olvides dedicar parte de tu tiempo a ello. 

  1. Agradece:

No todo es malo. Muchas personas querrían estar en tu lugar. Tener un trabajo, buenos compañeros, buen ambiente… Intenta ver el lado positivo de las cosas. Ser agradecido es una de las mejores herramientas. Pregúntate: ¿que puedo agradecer?, ¿qué aspectos positivos puedo encontrar?…

Estos y muchos más son algunos de los consejos que desde Emocional te recomendamos para una vuelta de las vacaciones saludables.  ¿Y tú, qué otros consejos añadirías? Te leemos en comentarios. 

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Pedro Espinosa García
Padre, emprendedor y psicólogo apasionado en el desarrollo personal. Mi misión es ayudar a las personas a que desaten todo su potencial.
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